Paulina Assmann
Astrofísica UdeC
Seremi de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación de la Macrozona Centro Sur
Recientemente, las universidades de Concepción, Católica del Maule, del Biobío, Talca, O´Higgins, Autónoma y Católica de la Santísima Concepción, junto al Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, decidieron coordinar el trabajo de sus técnicos y laboratorios para reforzar al sistema de salud pública.
Hace un poco más de un mes arribó el primer caso de Coronavirus al país y las noticias se han sucedido con una rapidez asombrosa. En medio de la crisis, los contagios superaban este domingo los 11 mil casos, y se cuentan 160 lamentables fallecimientos. En este escenario tan duro resulta clave comprender qué es el COVID 19, cómo se comporta y qué es lo que se viene. Y si bien se trata de un problema global, el rol que ha jugado la ciencia local para entenderlo, y enfrentarlo, ha sido clave.
El manejo de la ciencia de datos ha permitido a la autoridad ir conociendo con rapidez inaudita cómo se desarrolla la crisis, y tomar decisiones acorde. Asimismo, los avances en epidemiología permiten prever mejor cómo se extiende un brote altamente contagioso en un mundo globalizado hace rato.
No se trata de ciencia hecha en otros países. Hoy, en la macrozona centro sur del país, hay ejemplos de la importancia que tienen la investigación y la innovación regional en el desarrollo de nuevas tecnologías que resuelvan problema cuya urgencia es clara. Recientemente, las universidades de Concepción, Católica del Maule, del Biobío, Talca, O´Higgins, Autónoma y Católica de la Santísima Concepción, junto al Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, decidieron coordinar el trabajo de sus técnicos y laboratorios para reforzar al sistema de salud pública. Como resultado de ello se han puesto a disposición de los chilenos desde mascarillas impresas en 3D hasta una plataforma para solucionar dudas a través del smartphone o la web, y que alivia la carga del sistema telefónico del Minsal.
Además, y previendo un aumento de la demanda de camas hospitalarias críticas, se están desarrollando, ¡contra reloj!, prototipos de ventiladores mecánicos que podrían ser producidos localmente. En este último punto, Socialab, SOFOFA Hub y BID, en apoyo al Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación y el Ministerio de Economía, articularon una plataforma y red de expertos para el escalamiento de soluciones que puedan satisfacer el déficit de ventiladores mecánicos necesarios para la expansión del COVID-19 en Chile, donde 5 de 26 iniciativas fueron seleccionadas y una de ellas es el prototipo presentado por la alianza Asmar-Universidad de Concepción que hoy buscan certificarse.
Columna publicada por El Líbero
Menos inmediato, pero igualmente relevante, es la investigación que se hace en prototipos de antivirales de amplio espectro, así como también nuevas técnicas que nos permitan realizar diagnósticos y tratamientos paliativos. El Coronavirus, un problema global, ha demostrado de paso el valor que tiene la ciencia hecha en los centros de investigación y universidades locales.