Carlos Saavedra Rubilar
Rector de la Universidad de Concepción
En este momento, cuando nos enfrentamos como país a la emergencia sanitaria más compleja en su historia, quiero enviar un saludo fraterno a toda la comunidad y expresar el deseo de que todas y todos se encuentren en buen estado de salud al igual que sus familias.
Como comunidad, debemos agradecer profundamente el esfuerzo y el sacrificio diario que realizan por el bienestar de los demás cientos de personas que, por sus funciones, no pueden cumplir cuarentena, como servidores públicos, trabajadores de la salud, farmacias, supermercados y servicios básicos, entre otros.
Esta crítica situación que vive el mundo y el país nos obliga a asumir todas nuestras decisiones con la máxima seriedad, compromiso y solidaridad. Debido a lo anterior, por ahora, los esfuerzos individuales y colectivos deben concentrarse en disminuir al máximo la tasa de contagio del coronavirus, por lo que la medida más importante es mantenerse en casa, considerando que nuestra disposición al autocuidado ayuda a la protección de todos los demás. La única manera de detener esta pandemia consiste en que cada uno de nosotros mantenga un distanciamiento social que permitirá evitar contagiarse o contagiar a otros, impidiendo así el efecto multiplicador que se ha producido en otros países. Si actuamos comprendiendo lo anterior, conseguiremos ralentizar la propagación del virus y el sistema de salud podrá enfrentar escalonadamente la atención oportuna de los contagiados sin que colapse, como ha ocurrido en Italia y España.
Muchas comunidades, como el conjunto de instituciones de educación superior, así lo han entendido. Han propagado el clamor orientado al autocuidado y a permanecer en nuestras casas, porque procurar un aislamiento social efectivo es cada día más fuerte, extendido y necesario. En particular, la Universidad de Concepción ha tomado medidas radicales a fin de enfrentar de la mejor forma posible esta emergencia sanitaria. Para ello, en este momento, todas las actividades que pueden realizarse en forma remota se están ejecutando de esta manera, por lo que las funciones presenciales se han restringido al mínimo imprescindible para garantizar la continuidad del quehacer esencial. Del mismo modo, las actividades de formación en este período se realizarán a distancia a través de las plataformas digitales disponibles.
No obstante, ninguna medida será suficiente si no asumimos el rol que cada uno tiene para evitar la propagación del virus y superar en conjunto esta emergencia sanitaria. Esta pandemia nos llevará a vivir situaciones que pondrán a prueba nuestra imaginación, disposición y paciencia. Por ello, invito a cada miembro de la comunidad a la búsqueda creativa de medidas que nos permitan sobrellevar el aislamiento social, buscando en todo momento acompañarse de otros, aprovechando las oportunidades que nos otorga la tecnología. Es posible que en los próximos días se anuncien medidas que restrinjan todavía más la movilidad, el llamado es a respetarlas.
Si bien lo que vivimos nos instala en un escenario de mucha incertidumbre, también es cierto que las duras condiciones que regularmente enfrenta nuestro país nos distinguen como una nación que supera sus crisis de manera solidaria; una característica que, en estos difíciles momentos, requiere hacerse aún más presente. Hoy, en medio de esta emergencia sanitaria, es imprescindible internalizar la importancia de cuidarnos entre todas y todos, y así poder encontrarnos para abrazar a nuestros seres queridos prontamente.
Columna publicada por Diario Concepción
